miércoles, 2 de mayo de 2007

Tropez.ar


"Para crear, me he destruido; tanto me he exteriorizado dentro de mí que no existo sino exteriormente. Soy la escena viva por la que pasan varios actores representando varias piezas" dice Fernando Pessoa.
No puedo salir de algunos habitos muy destructivos. No sé como detener al malestar cuando comienza. Comienzo el día y me baño, y cuando me siento sucio, ya no puedo volver a sentirme limpio, en esta metáfora también explico la sensación tediosa de no poder dominar ciertas emociones. Tropiezo una, dos, tres, y a la cuarta pienso: "Perdón, ya no quiero estar más en ningún lado, ¿Quién me lleva a ese lugar?" Dentro mio una frustracion va carcomiendo y ensuciando esa frescura del momento después del baño, o del momento después de haber estado bien un rato habiendo sido natural. En el trabajo experimento mucho esto, y allí tengo que "disimular" (entre comillas porque ya no me esfuerzo demasiado en disimular nada) y seguir hablando y hablando, pero nunca sostengo la mirada, todo es un contacto comercial y superfluo.
El fastidio, el enojo...Deseo no haberme expuesto tanto en Tantas ocasiones...Siento mucho dolor cuando comprendo que eso no fue especial ni un momento sagrado. Solo fue un momento más, en algún día mas, de algún año mas. La ceremonia de Vivir.
Mis lágrimas son mas densas y el pecho es todo angustia. A veces, inmerso en el dolor, olvido porqué lo estoy padeciendo, y la respuesta no es desconocida. No debería JAMAS quejarme del dolor que padezco, porque soy el responsable. Eso es magnifico, uno es el verdadero hacedor de su estado. Eso inspira ganas de volver a intentar mejorías. Todo esto pasa y...ya pasaron minutos.
Cómo hacer para...y qué hacer para...
Noche en casa, noche de luna llena que no se ve por mi ventana. Azucares por donde mire y por donde piense. Hay una desaforada búsqueda en los placeres...
Sivananda dice: "El dolor viene en forma de placeres"...
Nunca experimente la perfección del equilibrio, porque doy brincos en las extremidades. Te Amo o te Odio, algo asi...y el equilibrio siempre está tan lejos. Mi ignorancia se pregunta si existe. Tropezar con la misma piedra es humano hasta cierta cantidad, sobrepasada esa cantidad es estúpido. Y cuando es estúpido hay que consultar ciertas cuestiones. Tengo que hacer algo con esto que me pasa. No aprendí nada, aun cuando creí sinceramente haber hecho algún progreso. Me asusto de reacciones que surgen sin un permiso demasiado conciente.
El que es feliz lo merece y también deberá aprender a vivir con eso. Cada uno realiza su propio camino, los baches, los pozos, las trabas que uno mismo le pone a su camino, los obstáculos, los problemas, quiero escapar de todo lo conocido porque me harto de no llegar a resolver nada, por experiencia en años digo que no soy una persona recomendable.

Quisiera ser un Árbol con hojas amarillas que va perdiendo poco a poco sus hojas, que las hojas sean los miedos, los apegos, los malos habitos, la personalidad...y luego quedarme estático, aprendiendo a convivir en quietud, con lo que está y lo que no está.

"Si estáis constituidos de tal modo que sentís igualmente el más leve roce de la felicidad, sentís igualmente el más leve roce del dolor. Los mismos nervios que conducen sensaciones de placer conducen también sensaciones de dolor, y la misma mente percibe dichas sensaciones. El progreso del mundo significa más diversiones, pero también más miseria. Esta mezcla de vida y muerte, de bien y mal, conocimiento e ignorancia, es lo que llamamos Maya o el fenómeno universal. Podéis permanecer durante toda la eternidad aprisionados dentro de esa red, buscando la felicidad; la hallaréis en abundancia, como asimismo la desdicha. El creer que podemos conseguir lo bueno sin lo malo es ingenuidad infantil y necia. Sólo quedan dos caminos. Uno consiste en abandonar toda esperanza y aceptar al mundo tal cual es, soportando los golpes y las desdichas con la esperanza de recoger de vez en cuando unas migajas de felicidad. El segundo camino consiste en abandonar la búsqueda del placer, sabiendo que éste es otro aspecto del dolor, y buscar la verdad; y quienes se atreven a indagar la verdad acaban por descubrir que está siempre presente – presente en ellos mismos. Luego descubrimos también que la misma verdad se manifiesta a la vez en nuestro conocimiento y nuestros errores relativos; descubrimos que esa misma verdad es la dicha que se manifiesta asimismo como el bien y el mal, y al mismo tiempo hallamos la verdadera existencia, que se manifiesta a la vez como muerte y como vida." Swami Vivekananda fué quién escribió tales palabras. Las voy a re-releer. A Vivekanda lo tengo que leer muy lento. Incluso releyendo varias veces cada oración.

"La vida es un misterio, no un problema para ser resuelto" dice Alberto Einstein.
Hoy la vida es triste y sin embargo se exige de mi el máximo esfuerzo. Y yo hace mucho que estoy llorando para no esforzarme, porque me es mas facil pensar que soy perezoso que enfrentar estas cuestiones destructivas. Y superarlas, de una bendita vez por todas. Es preocupante mi actitud, a veces pienso como si de verdad este absurdo y lleno de sentido estado de permanente insatisfaccion me acompañara toda la vida en este cuerpo.
Ya son las 23:44, eran las 20:20 aproximadamente, cuando comencé a escribir. Soy otro, y soy el mismo.
Con mi bicicleta y piernas pude haber atropellado a el famoso hombre que dice Oooooooocho, junto a su esposa (conclusion propia). Tarde de canciones de catalogo, mirando el reloj; si pasa los 4 minutos, no será un Hit(!!!). Frivolidades del espacio frívolo y la semana que viene: Horacio Huarez y sus poemas pesimistas.

"Estás triste, porque te abandonan y no estás caído" dice Antonio Porchia